Hijos de funcionarios del Hospital de Quellón recibieron estímulos escolares por lograr los mejores rendimientos el año 2017
15.03.2018 17:14
Un total de 22 alumnos de enseñanza básica y media, hijos de trabajadores del Hospital de Quellón y socios del Servicio de Bienestar, recibieron Estímulos Escolares por obtener notas igual o superior a 6,0 en sus rendimientos académicos en el pasado año escolar 2017.
La ceremonia íntima, que se desarrolló en el Casino del recinto hospitalario, contó con la participación de representantes del Servicio de Bienestar del Servicio de Salud Chiloé, el Director del Hospital local Carlos Zapata, integrantes del Comité local de Bienestar, pero muy especialmente de los alumnos destacados y sus papitos, quienes emocionados presenciaron el reconocimiento de sus retoños.
“Quiero felicitarlos (a los niños) por el empeño que le siguen poniendo en sus estudios, pero también reconocer el trabajo que realizan sus papitos por ayudarlos a alcanzar los mejores rendimientos”, señaló en sus palabras el Director Carlos Zapata.
Mientras que Gladys Mansilla, integrante del Comité local de Bienestar, señaló que “estamos felices de que todos los años podamos estar entregando éstos estímulos a los hijos de nuestros funcionarios”, dijo.
Álvaro Bórquez, papito de Alonso Bórquez Padilla, valoró el aporte económico que se entrega a los niños, sobre todo en un mes en el que los gastos aumentan considerablemente. “Yo hice un compromiso con mi hijo de que todo el dinero sería íntegro para él y así lo haré, y ya me dijo que ocuparía parte de su premio en adquirir un buen libro”, dijo.
Fernando Cuyul, papito de Tomás Cuyul Vargas, señaló “me siento orgulloso, porque es un estímulo para él, pero también para nosotros como papás para seguir apoyándolo. A veces por flojera de los propios padres tratamos de entretenerlos con la televisión e internet, y las tareas muchas veces se transforman en castigos para los niños. Pienso que esto no está bien, debemos apoyar a nuestros hijos”, admitió.
Junto con los estímulos, en la ocasión también se entregó un moderno notebook como premio PSU al alumno Carlos Lazo Valdés.
La actividad culminó con un cóctel, el cual fue preparado especialmente para la ocasión, reafirmándose de manera colectiva en los niños el deseo de mantener sus buenos promedios y ponerse a trabajar para el próximo año puedan recibir nuevamente la distinción, algo que, según dijeron muchos papás, esperan con ansias.
Este año, el estímulo escolar consistió en la entrega de 25 mil pesos, además de un diploma de honor.